Hoy en día son muchos los propietarios que no se atreven a alquilar sus inmuebles por miedo a que el inquilino deje de pagar o incluso se convierta en okupa y no puedan recuperar su vivienda.
Afortunadamente, esto tiene fácil solución: contratar un seguro de impago de alquiler. Con esta póliza podrás arrendar tu vivienda sin temor a que surjan complicaciones durante el período de arrendamiento.
¿Por qué necesitas un seguro de impago de alquiler?
Para evitar problemas en caso de que el inquilino deje de pagar las mensualidades.
Cobertura de las mensualidades impagadas, indemnización ante actos vandálicos, cobertura de deudas de suministro del inquilino o asistencia jurídica son algunas de las coberturas que estarán a disposición de tomador.